domingo, 25 de diciembre de 2011

Altos linajes

Vuelan moscardas por las susaetas mórbidas, donde gentuza y gentezuela se pasa y se transforma en viril condescendencia con sus compañeras las tuercas, y el pan se amolda a su estrella, y la vida es poesía.

Cada día se come comida de cazuela, y en un barco crecen torres blancas italianas, sin más compaña que peces pequeños del tamaño de ballenas, que saltan y mojan la cubierta, jugando con las sábanas del barco como si el agua plateada del mar fuera a salvarlas.

No quiero herir a nadie, y tiro al suelo mi pistola, y saco el pitillo de la boca y me quito el barro de las manos. Pero no por no querer herir a nadie se acaba la guerra o eso dice mi sombrero, aquí nadie gana. Y te guardas los cuernos, me invitas a la cena y te pago con mis cuatro lados.

Las charlas normales son cotillas, cotorreos como tirotea mi madre. Son botellas verdes sin mensaje dentro de ellas, solo vino picado y reciclaje de morera y hierro. Pero quién soy yo para hablar de la que no es mi lengua, tal vez es eso lo que las saliva. Tal vez el aleteo, la levitación, el baile con el aire haga humana la compañía. Y después de esta descripción bien humanas podrían ser las palomas. Pero quién soy yo para hablar de la que no es mi vida.

Me mojo los labios con vainilla y se me cristalizan, y se van partiendo como tejas españolas por efecto del sol y el viento. Se ennegrecen con lo negro y se enrojecen con lo rojo. Y van cambiando de color conforme se van colorando y descoloriendo.

Frutales, verbales, nogales, perales, universales. Son cuadros de un único ritmo y una única aspiración. Un hilo dorado del que pende toda una cesta de plomo enlingotado. Y para sorpresa de la audiencia el hilo no lleva a ningún lado, es solo un cable que brilla, excelente, rígido y altivo, y saluda al público sonriendo con la mano.

Misterios. Esas lisas capas de hielo donde uno se ve reflejado. A veces son más gruesos y a veces no tan gruesos, dependiendo de cómo el frío se ha sentado en el alba. Y detrás del hielo siempre hay solo agua. Agua algo más oscura. No es decepcionante, es simplemente un charco de agua oscura. Y coges un buen prisma de hielo, y dejas que lo bañe el sol con tu cara al otro lado, y lo aprietas bien fuerte, y buscas una superficie dura, y lo lanzas contra ella para que reviente en una decena de pedazos. Porque nos gusta romper cosas, ¿sabes? Nos gusta romper, apretar los dientes y cuidar la compostura cuando miran. ¿Sabes?

martes, 8 de noviembre de 2011

Cosas buenas

- La fiesta de Hollywood en el superclub: hablar con las rubias y que no nos hicieran caso en la zona pitis. Robar cubatas, Irán, no acordarme de nada, el maniquí, la limusina (nacho subido encima), cubatas a porrón, abrir la nevera de la casa, llevarnos un SKYY, pusieron temazos toda la noche, comernos una carls jr. al día siguiente, nos subieron a un vip, nacho defendiendo mi sensibilidad.
- Yosemite
- San Francisco
- Las conversaciones con piti en la calle con Nacho
- La six dollar justo antes de ir a la reunión de DEO
- La locura de Las Vegas
- Algunas conversaciones largas
- Las blueberry muffins
- Los silencios cómodos y las risas de los cuatro
- conocer a chris y a ini. El día de Rebel Bingo, conocer a gente interesante.

lunes, 7 de noviembre de 2011

Hay muchas cosas que si las entiendes no funcionan

Es muy raro. He llegado a ver la falta de color. Creo que estar en esta habitación demasiado tiempo me seca. Me vuelve loco. Y el puto Facebook. También me vuelve loco. Paso demasiado tiempo delante de esta mierda. Puedo ver cómo los colores de las cosas van cayendo como pequeños ríos. Puedo ver los ojos de cristal azul mirándome fijamente. El vacío, congela el aliento.

¿Cuál es mi problema? Pensar demasiado resulta ser un problema. Preguntar también, parece ser. Tienes que crear una especie de tejido invisible que te forme como una persona entera. Pienso en personas concretas. No me desprecian. Pero no encuentran atractivo en mí. Nadie aquí lo hace y mi autoestima sigue a los colores. Color metálico, como el mercurio o el estaño, termina de vaciar el relieve empedrado dejando al musgo y al olvido conservar la forma que desde el principio se le había dado.

Nota a un buen amigo

[...]De hecho me gustan tus consejos. Hacen entender que tienes todo ganado pero tú y yo sabemos que no todo es así. Me gusta cómo piensas, me recuerdas a mi padre. Unas cuantas ideas que repites en tu cabeza como mantras. Te diría que para mí es más complicado que eso, pero la complejidad siempre podrá ser más un escudo que otra cosa. Es como si yo mismo hubiese escrito en mi cabeza los bosques de complejidad que me apartan de lo que me rodea.

No te voy a decir que mi vida ha sido difícil. Sin embargo he ido alejándome del pensamiento normal, me resulta cada vez más difícil follarme a las mentes. Sobre todo aquí. Siento que no hay nadie activo, la gente se asusta cuando intento conocer capas ulteriores de su mente. Me decepciona lo rápido que toca fondo mi polla mental en sus vaginas cerebrales.

Sigo tus consejos más de lo que crees, creo que eres una persona muy afilada en ciertos aspectos de tu vida, y eso me gusta. Pero sin embargo tienes que entender que hay un gran vacío entre tu mente y la mía. Nuestro núcleo es parecido pero todo lo que hemos construído alrededor es eternamente distinto. Probablemente porque yo me pasaba el día jugando al Counter y haciéndome pajotes con María Abradelo cuando no había internet, porque La Cañada estaba lejos de cualquiera de mis amigos, empecé a construir una complejidad boscosa. Tener el grupo me ayudó a hablar rápido y concreto, a tener siempre un par de ideas escondidas en la manga.

Mi padre me ha enseñado a aprender y a dar gracias. Me hace en ciertos aspectos alguien imprescindible y de confianza. Pero mi padre es de moral rígida y algo religiosa. Y lo llevo dentro de mí, la empatía y la filantropía me atan a la gente. Sé que puedo ser superior a mucha gente, pero veo mi vida como una oportunidad para elevar a mi nivel a esa gente. Lo sé, no es un mantra ni de ganador, ni de competitivo. Probablemente me lleve a construirme una personalidad impecable pero no a triunfar tanto como esperaba. Hay algunas cosas que no puedo evitar, o que son realmente difíciles de cambiar.

Soy único, especial. Claro que sí. Soy el primero en saberlo. Esta unicidad, esta especialidad son mi virtud y mi tormento. Soy un perfecto sociólogo, puedo marginar mi identidad del resto de las personas y analizar con mayor amplitud. Y también soy difícilmente atractivo, porque no soy comprensible y creo confusión, porque no puedo soportar la estrechez de miras y me falla el tacto en ese momento, porque no encuentro gente que escuche con las otras orejas, porque es infinitamente triste lo que asusta a la gente el pensamiento, todos los inventos de los últimos diez años han sido creados para no construir hacia adentro, sino para dar lo máximo de ti mismo hacia afuera, para estar alegre más tiempo, para pensar menos. Quiero follar mentes Jose, pero mentes de colores y sabores. Mentes diferentes y no tejidas en un mar blanco hueso.

Lo sé, soy un autocompasivo y me retuerzo en lo poooco que me entiende la gente. No solo pasa eso, también encuentro gente que me admira, gente que me necesita, con la que está bien pasar el tiempo, que me escuchan como pueden y me quieren. También construyo hacia adentro, me estoy haciendo más fuerte porque mucha gente sigue decepcionándome.

Te voy a contar algo que quiero que entiendas. Se lo he contado a muy poca gente. Me pasa muchas veces que quiero huir. No solo aquí. En Barcelona. Y en Valencia. Muchas veces creo que hay algo mejor en otra parte. Soy ansioso y exigente. Solo la música me calma. Me pasa menos, lo puedo controlar y lo relativizo. Pero tal vez tenga que ir a un psicólogo.

A pesar de que parezca un paisaje devastador esto es lo más normal en mi vida. En general estoy muy bien, me río, saco buenísimas notas, voy a sitios, y paso tiempo en el gym y comiendo comida mierda.

Y por último, si llegas a leer esto, me gustaría que aunque, no es tu estilo y lo acepto, intentaras leer esto como un amigo. Me gustan tus consejos, me los como todos y releo de vez en cuando porque tienes ideas valiosas, pero necesito que me escuches para interiorizar quién soy. Quiero que comprendas hasta el último ápice de lo que te he explicado hoy. Y luego si quieres me aconsejas.

un abrazo enorme

domingo, 6 de noviembre de 2011

No tengo una respuesta para todo. Y la gente cree que la tengo. Me gusta ser una referencia, pero me gustaría a mí también dejarme caer encima de los demás. Mis modelos a seguir no lo harían. Pero yo soy mucho más débil. A mí me importan las personas, no soy de moral flexible.

Hay cosas que tengo que esconder. ¿Pero el qué? Hace tiempo que dejé de ser humano. Ya no tengo punto de referencia. Tendría que empezar de cero otra vez. Nacer e ir al colegio.

Tengo que hacer listas de preguntas. Hay tantas cosas de la vida que he perdido de vista.

Prácticamente no sé vivir con lo que tengo.

Carrusel

Cuando no hayan personas, huye hacia los proyectos.
Cuando no hayan proyectos, huye hacia las personas.
Cuando no hayan ni proyectos ni personas... simplemente huye.

miércoles, 26 de octubre de 2011

Muescas y usos ginecológicos

Me gusta el ruido de la madera crujiendo en suelos de enormes salas, me gusta el frío insoportable de una misa de gallo y tener justo al lado a mi abuela y su abrigo de pelo. Me gusta ser acogido, acariciado y preguntado. Me gustan las caminatas mañaneras escuchando música con las que en ningún momento pensarías que ibas a disfrutar.

Soy Woody Allen. Quiero decir que soy como él. No necesito explicarme, sé a qué me refiero. Es increíble, da cierta esperanza. Aparentemente no tengo solución pero tampoco es un problema. Poca gente puede decir que se siente Woody Allen, la mayoría de gente te mirará raro y pensando: "no eres como Woody Allen, está actuando de personaje excéntrico, no existe nadie así". Y ahí es cuando dejas de hablar, cuando asimilas que no hay tantos como tú, BIEN!!! pero al mismo tiempo interiorizas que no hay tantos como tú, MIERDA!!! Echo de menos una cara que diga: sí sí sí!!! exacto!!!

Los cuellos. Me apasionan. Los mofletes rojos. Las orejas saliendo del pelo largo. Los olores. Estoy hecho para vivir en una maldita película. Persigo lo que la gente deja solo para los sueños de cualquier otra persona.

Echo de menos una sinceridad que me guste. Tener que combatir con latidos inoportunos y bufidos interiores. Buscar y encontrar. Alimentarme de nuevos buenos consejos. El arroz al horno, la paella y el embutido con queso. Echo de menos la mano con la que escondo la libertad que me pertenece. El olor a invierno en el patio lateral de mi casa. Ser ordinariamente infeliz. No tener la necesidad de acallar esos ecos que hacen de mi hueco calavérico un patio de colegio.

Pretty obvious... huh?? No me gusta la forma que tienen de no estar de acuerdo los americanos. Me pone realmente nervioso, hacen como que han escuchado otra cosa o intentan adaptarlo de forma infructuosa a lo que piensan ellos, o directamente no escuchan. Me quedan aproximadamente 1 mes y 21 días. A veces es mucho, a veces es poco. Quiero creer que lo que me espera en casa siempre es mejor. Siempre espero cosas mejores la próxima vez, soy demasiado paciente y demasiado... cómo es esta palabra... complaciente.

Ni de coña me levanto mañana a las 9 para ir al gimnasio. Niiii de coña.

sábado, 22 de octubre de 2011

Una magdalena que me lleva a la gloria

Qué bien me escuchas. Mis teorías. Qué bien que escucha la gente que lo necesita. El problema es que la mayoría de veces la gente que no tiene la necesidad de escucharte. Blueberry muffin, Dios lo cagó y vino del cielo en bandeja de plata. Actores y rodillas.

Es fascinante mi capacidad para pasar de la mierda a altos vuelos. Es increíble lo débil que me sentía hace poco y lo capaz que me siento ahora. Es triste saber lo mucho que necesito a la gente pero no me puedo engañar, si no necesito a la gente soy un psicópata. Solo que tengo que saber limitar mi dependencia a aquella gente que no me va a hacer daño y tengo que procurar contar a esa gente con los dedos de una sola mano. Esa es la clave, no desparramarme como chocolate caliente encima de la gente. Aprender siempre viene bien.

Lo más importante es saber que no hay frases simples verdaderas. Que los matices cuentan. Que buscar profundidad está bien pero hay que saber con quién, y si no lo encuentras escribe aquí pero no molestes a alguien que no te puede entender. No esperes respuesta inmediata de los dedos de tu mano, pero al menos sabrás que la respuesta es fidedigna, que han escuchado y han comprendido.

Qué fácil es todo cuando todo es fácil.

viernes, 21 de octubre de 2011

en cornisas

No dejes llevarte por el llanto. Es un simple emoticono. Hoy es día de consejos.

No te dejes llevar por lo que ocurre. Déjalo fluir y di que lo dejas fluir pero no lo dejes fluir. La mayoría de gente no miente, pero le cuesta demasiado entender más allá del nivel en el que siempre se han movido. Las cosas siempre han sido así, la ventaja competitiva de los viejos y los gilipollas.

No dejes llevarte por el desgarro. Nos dijeron que el infierno era caliente y repleto de fuego y tortura. Algunos daneses apreciarían ese tipo de temperaturas.

No hay una solución para los problemas más básicos de la vida. El primero y más básico es que la vida se acaba. Están buscando curas a la muerte pero por ahora funciona como el primer día. El segundo y menos básico es que tienes que saber buscar el equilibrio, admitir que todo es positivo y negativo. Pero no sabes donde está el centro porque no existe una vara de medida. El tercero y menos básico aún es que es difícil hacer ciencia con el ser humano pero imposible hacer ciencia con uno mismo. El mero hecho de ser analizador y analizado crea una serie de reacciones en cadena que se pueden prolongar hasta el infinito así que la solución casi siempre es ninguna o indefinida.

Aunque bueno si no tienen solución no son problemas.

martes, 11 de octubre de 2011

La energía

Está en los demás. Está en no mirar continuamente al otro espejo, al yo pared, yo extraconsciente.

Es increíble lo rápido que la agoto. Cuando la noto en mi cuerpo solo quiero usarla. Soy intenso y fugaz. De repente vuelvo a desaparecer, tintineo mientras desacelero mi ritmo. Soy víctima de la hiperactividad durante 10 minutos diarios. No sé repartirme, untarme en mi día como la nocilla o la sobrasada.

Vuelve todo de blanco a negro. ¡Qué rápido! No quiero ni pensar en las connotaciones sexuales que tiene el decir que soy intenso y fugaz.

Toda mi energía la dedico a los demás, por eso las torres, por eso los espejos. No consigo todo lo que quiero porque pongo mucho empeño y es el empeño el que asusta a la gente y el que hace que la gente me decepcione.

Se vuelve absurdo el hablar aquí solo, en algo que puede leer cualquiera. Donde la probabilidad de que alguien que me conozca lea esto es ínfima, más pequeña incluso que la probabilidad de que se encuentren un diario en medio de la habitación.

The more you try to erase me the more that I appear. Mis subconsciente carbonizado se comporta igual que thom yorke. No existe una manera de hacerlo simple conscientemente y hacerlo bien. Y la cosa empeora cuanto más lo complicas. Lo sé, no doy pistas para hacerlo bien. Pero es que no tengo ni idea.

Me castigo mucho cuando lo hago mal pero no sé hacerlo de otra forma.

Uno de esos días

Sentir que necesitas algo y volverte paranoico.

Creer que controlas la situación y averiguar que te están controlando a ti. O lo que es lo mismo, tenerlo todo claro y descubrir que nada de lo que tenías tan claro era cierto.

Hacer daño y perjudicarse a uno mismo. Moverse entre arenas movedizas, hablar a zarzas que no arden, mentir, seguir sonriendo, notar la presión en el cerebro, recibir una notificación de gmail en un momento apropiado.
Decepcionarse. Y no saber si la decepción es por los demás o por ti mismo. Eso sí que es malo, eso es terrible. No le deseo eso a nadie. No sabes cómo actuar. No sabes cuál es el problema. No sabes si algún día acabará.

¿Habrá alguien que me comprenda? ¿Seré yo que no comprendo a los demás? Los infinitos espejos contrapuestos. Soy una torre inexorable, los demás son una torre inexorable. No llegas a entender hasta que entiendes, hasta que llega un día que dejas de entender y entiendes que no entendías absolutamente nada.

Y terminamos hablando de si las cantantes gordas son guapas o no. Venga no me jodas. ¿Es puro teatro o no sabías de que hablabas cuando decías la palabra "ver"? ¿Convertirte en una especie de BabyBorn que quiere comer, cagar y tener perritos es tu escudo de protección?

Definitivamente no puedo estar rodeado de tanto bicho inanimado. Directamente soy yo.

domingo, 9 de octubre de 2011

Mentir como instrumento de control y aceptación

Decir que estás bien. Buscar proyectos conjuntos. Exacerbar la profundidad de la relación con la persona que estás hablando. Hablar de los viajes que has hecho como Steve Jobs hablaba de sus creaciones, con adjetivos superlativos y carentes de sentido después de tanto sobeteo.

Tener una opinión predefinida agradable para todos y coherente con la sociedad. Denigrar el trabajo o los gustos ajenos como símbolo de profesionalidad, conocimiento profundo y elitismo.

Omitir frases y hechos en contra tuya para que te apoyen. Ponerte estados en Facebook populistas y dicotómicos para recibir likes hasta vomitar de gozo.

Solo hay tres tipos de personas: Estúpidos, mentirosos y frustrados.

Toda decisión tiene ventajas e inconvenientes al 50%. Absolutamente todo. La única variable a tener en cuenta es que te vas a morir algún día. Lo que tendrás que procurar es que antes de que te mueras las ventajas consecuentes de la decisión sean mayores o iguales a los inconvenientes. Claro que si procuras hacer esto perderás un tiempo precioso antes de morir. Es el inconveniente. Solución: sé estúpido y aleatorio en tus decisiones, si intentas ordenarlas y darles lógica el propio caos de la realidad se encargará de que no consigas nunca lo que te propones. No te propongas nada y conseguirás exactamente lo que te propones, nada. Así de simple.

Vale, me he excedido. Pero vamos, utiliza la intuición y no seas demasiado consciente de lo que haces o perderás demasiado el tiempo, justo lo contrario de lo que querías conseguir con toda esa parafernalia analítica y metodológica.

Así mejor.

Odiar

Esto es lo más fácil que existe. Incluso desde un váter es fácil.
No sabes llegar a ninguna parte, lo único que queda es despreciar. Odiar no es más que no saber amoldarte a los hechos, no saber cómo enfrentarte con una pared de realidad, con una olla de aceite hirviendo de realidad, con un ejército de vástagos del infierno de realidad.

Odiar es símbolo de algo oculto. El odio siempre se puede despedazar en razones más pequeñas para buscar algún orden astrológico en las piezas. Casi siempre muchas tienen ciertas cosas en común: inseguridad, lazos, dogmatismo y sufrimiento.

Casi siempre.

Y supongo que no tengo nada más que decir. Odiar es una palabra tal vez demasiado fuerte. Como casi todo. Siempre se exagera todo para darle más contorno, más transcendencia. Si especificas el grado ya no es tan creíble. El idioma está dominado por los gilipollas y por vendedores de teteras.

y mentales

La primera vez es poesía, las siguientes literatura.
La primera vez es paja, las siguientes práctica. O momentos de ocio.

Oigo una voz. No me dice que queme cosas. De hecho no creo que me hable a mí. Está en la calle. Se confunde con todo lo demás pero sé que es una voz. No es una metáfora.

sino un vertedero

Mis eternos juegos. Me perseguirán hasta que me muera. El infinito no se entiende hasta que no se comprende. O al revés. O en los dos sentidos. El infinito es lo que tiene, que no tiene mucho sentido o tiene muchos sentidos.

Si te sirve para ahogar penas, para ordenar pensamientos, para no destrozarte por dentro, o de hecho, para destrozarte por dentro, eres un artista.
Si lo buscas, si procuras que suene, que tenga un tono, en general si procuras no eres artista, eres empresario. No es malo, nada es malo cuando nace, o eso decían los Hobbits. Para eso estamos, ¿No? De algo hay que vivir, ¿No? Dios cinco años de carrera para esto.

La gente se preocupa o se asusta, por eso no debe conocer sobre mí. Mi sinceridad explosiva es una mierda, no sirve para nada. Hay más voces ahora, ninguna familiar, creía que sí. Dependo tanto de los abrazos que me doy pena a mí mismo.

No quiero consejos precocinados, nadie escucha, nadie reflexiona sobre mi caso. Parece que la vida debería ser mucho más simple que esto. Se ve que yo he cogido el camino largo, tiene mejores vistas pero casi siempre vas solo. Y compartir una buena vista con tu mano no es un bocata de cardenal.

Complacer. Con mucho gusto. Estoy empezando a cansarme de escribir y casi no llevo nada. Moqueta azul, botones negro y recepcionista afeitado, con pelo hacia atrás y algunas canas, un poco rellenito, y sonrisa de entre triunfador y bonachón. A lo John Goodman haciendo de Pedro Picapiedra.

Quiero amor. Y suena mal. Por esto no lo debe leer nadie. Quiero amor y sentir como antes. Quiero respirar fuerte igual que hago por una cascada pero hacerlo por alguien. Supongo que está en mis genes. Necesito reproducirme.

Tengo miedo de lo que debo elegir? O es que me afecta demasiado la opinión de la gente? Seguro que las dos cosas influyen muchísimo already. Estoy demasiado atomizado como para poder llegar a saber.

Un segundo que me pongo algo de música y me inspiro. Vale va, antidotes de foals.

No pienso crear nada nuevo, ya tengo bastante con lo que no para de salir a borbotones de un agujero en mi cabeza. Piruletas y chupachups fiesta, y noches sin color de noche. Estos deberán estar en Las Vegas. Me alegro por ellos. Eso que ganan.

No soy inseguro, no en ese sentido. No soy patético. O sí. No lo creo. Soy medidor, soy tranquilo y apaciguador. Ahí sí que me siento patético, a quién coño se le ocurre ser lo mejor posible para los demás. La única forma de ser lo menos necesario para los demás es ser lo que los demás necesitan. La gente no quiere necesitar y admitirlo y saber que eso concierne a otras personas. No Nononononono por favor, demasiados riesgos, abres un agujero en una especie de burbuja que te creas. Es posible que esta incapacidad para construirme una burbuja me haya convertido en el monstruo que soy, en el arma de destrucción propia y de nuevas relaciones. Soy un tsunami de sinceridad y al mismo tiempo de hipocresía. Supongo que combinado en la mezcla suficientemente agitada como para que el resultado sea lo que soy. Adorable, acariciable. Alguien sin personalidad. Alguien que siempre está ahí. Con el que te podrías casar si la cosa va mal.

Dios, qué patético ha sonado en un segundo.
Necesito huir de mí.
Y sigo mirando, esperando una respuesta a la que voy a responder con más odio patético. Es una situación plenamente patética, repleta de egos y orgullos, sin solución aparente, sin familia ni sábanas blancas de hotel.

La idealización, la perfección, eres perfecto tal y como eres pero tienes que madurar, tienes que entender que necesito esto, pero eres perfecto tal y como eres. No hay nadie perfecto para mí porque no soy perfecto para nadie, y viceversa. No soy un incomprendido cualquiera. Soy indeseable en muchos aspectos. Mi exterior da tranquilidad, mi interior es un tatami donde luchan titanes con superpoderes.

Mi cabeza no me va a dejar en paz, no pretendo asustar, solo sentirme cómodo más frecuentemente. Por qué le doy tantas vueltas a todo. Por qué hago negro lo que ha empezado como blanco.

Tal vez y solo tal vez la solución esté en no buscar orden sino buscar el desorden, no buscar criterios, ni pautas ni patrones. Darle más trabajo diario a la intuición. Si no moriré realmente joven y/o mataré a alguien demasiado pronto.

Mi aleteo volverá algún día en forma de aleteo. Lanzarás una flecha que tú mismo terminarás clavándote. Eso es el karma, el truco está en no lanzar flechas o apuntar tan bien que sabes que donde te duela te dolerá poco. O no. Qué sinsentido tiene lo que digo.

Soy más rápido cambiando de opinión que el i5

nueve del diez del dos mil once

Me estoy meando.

Y cuando digo piensa no pienso. Y cuando quiero no pensar no pienso. Soy el aparato peor construido del mundo. Y las cosas no me gustan cuando me tienen que gustar y las necesito cuando no las tengo en las manos. Pero qué cojones me pasa. Soy raro. No sé lo que quiero ni cuando lo quiero. No estoy seguro de nada, todo son juegos infinitos. Espejos contrapuestos. Infinitas soluciones. Ser lo más racional posible te hace ser lo más irracional posible.
Parece que cuando los franceses vayan a hablar se hayan quedado enganchados. Como un Windows 95 y el nuevo photoshop. Ojos y labios de pez. Dios qué asco me das cabrón. Cómo odio tener que darte los buenos días.
Mi dedo gordo del pie es una puta berenjena. ¿Quiero que alguien lea esto? No tengo ni idea. Estoy atomizado, me he convertido en cereales de colores. Tengo una personalidad aparente sin nada debajo. No soy nadie. Soy millones de flechas concéntricas, cuando la presión sea excesiva se desharán y desapareceré otra vez. Y volveré a aparecer otra vez, con mis espejos contrapuestos, mi incapacidad para explicarme, mis teorías siempre insuficientes para explicarme como soy. Mi incapacidad de utilizar mi cerebro cuando quiero.
La gente no me entiende, parece ser. Me trabo y digo palabras sin aparente sentido. Me siento estúpido, me pica todo, trago saliva y se me ensucia el pelo. Siento los brazos demasiado cortos y las piernas demasiado cortas. Hay como una docena de americanos american style gritando, poniéndose borrachos buscando el coma etílico. Yo he tirado una bolsa con agua por una terraza y me he hecho colega de varios seguratas. Incluyendo una pava. No hay nadie que me sepa escuchar.
Nadie, en realidad ni yo sé escucharme. No puedo evitar querer interrumpirme, forzarme a pensar algo romántico, algo que guste a todos, que sea de buen ver, que cambie la opinión de la gente sobre mí, que me haga atractivo más fácilmente.
No voy a solucionar nada, ni ahora ni nunca, y podré hacer tantos diagramas como me salga de los cojones, no voy a resolver nunca nada. No hay manera óptima de actuar. Todo son espejos contrapuestos, todo son conferencias llenas de eduardos punset, lacasitos, hierbabuena, floritura, quistes ováricos, orgasmos predefinidos, sopa de hinojo, manutención prematura, signos de interrogación, hijos secundarios, malentendido, y un largo etcétera seguido de otros cuantos etcéteras más (un poco más cortos).
Secuestro. Ah, y qué bonito es las Vegas. ¿Por qué tengo que contarle las cosas a la gente como ellas quieren? ¿No será que soy gilipollas? No se me entiende, es imposible, es improbable, es definitivamente más que improbable. Cuando pienso en esto solo pienso en oreos y chips ahoy. Quiero absurdo pero quiero seriedad, quiero independencia pero con cuidado, quiero lo que no tengo y lo que no quiero y lo que no puedo dar y lo que no puedo recibir. Estoy condenado a ser infeliz mientras me acuerde de mi condición de infeliz. Sí, nada terminará teniendo sentido, no estoy escribiendo para ti, o no quiero escribirlo para ti. Me quiero autoconvencer. Y no, no voy a poner una canción ahora por lo que puedas pensar de mí.